La ganadería contribuye a tres tipos de contaminación. En primer lugar, a la contaminación del agua por la escorrentía posterior al esparcimiento de purines o por lixiviación resultante de aportes excesivos. A continuación, la contaminación del aire relacionada con compuestos gaseosos y malolientes emitidos en los edificios durante el almacenamiento o el esparcimiento. Luego, a la contaminación del suelo que puede ser causada por un aporte excesivo de nutrientes y por lo tanto conducir a desequilibrios y acumulación de sustancias químicas como metales pesados. 

Los edificios ganaderos y el esparcimiento de purines son fuentes de emisiones de una gran cantidad de compuestos gaseosos si no se han tratado previamente con Global-Tabs (más de 100). Entre estos gases, algunos son especialmente preocupantes, como el amoníaco (NH3), el metano (CH4), el dióxido de carbono (CO2) (gas de efecto invernadero), el sulfuro de hidrógeno, el monóxido de carbono (peligroso para la salud humana) y el óxido nitroso (N2O) que daña la capa de ozono y que se produce durante los procesos de nitrificación-desnitrificación. La mayoría de los otros compuestos gaseosos están presentes principalmente en estado de trazas, pero colectivamente contribuyen a los malos olores.

«Descompartimentalización» de la evaluación del impacto ambiental de las explotaciones:

• Protección del agua (contenido de microorganismos patógenos y amoniaco y formación de metales pesados) 
• Problemas de calidad del aire (olor + nitrógeno)  
• Protección del suelo (contaminación del suelo por bacterias). 
• Salud pública (consecuencias de los primeros 3 puntos sobre el vecindario). 

Los sistemas de producción varían mucho de un país a otro y, a veces, incluso dentro de un mismo país, ligados a la diversidad de paisajes, climas y culturas. 

El ganado se cría principalmente en naves, con un sistema de recogida de estiércol líquido en forma de purines. Estos últimos pueden tratarse antes de ser instalados en los distintos puntos agrícolas. 

El tratamiento en los lugares de almacenamiento permite:

• Erradicación de olores en menos de 20 minutos.
• Desinfección de todos los agentes patógenos contenidos en el agua y en los lodos. 
• Eliminación de la mayoría de metales pesados que perjudican la producción agrícola.  
• El uso de un fertilizante de calidad para el agricultor, en forma de nitrato evitando los peligros del amoniaco y de los nitritos.